La Biblia enseña que el cristiano debe limpiarse de toda inmundicia de la carne del espíritu. Es decir que después de haber experimentado el nuevo nacimiento se necesita ser limpio de inmundicias y contaminaciones que afectan el alma y el espíritu; para perfeccionar la santidad en cada cristiano.Un ejemplo idóneo para comprender el proceso de descontaminación del alma y del espíritu lo vemos en el proceso en el que Israel conquistó Canaán (Ro. 15:4). Cada uno de los enemigos que Israel derrotó, expulsó y/o destruyó representan los enemigos, inmundicias y contaminaciones que deben ser derrotados, expulsados y/o destruidos de nuestro cuerpo, alma y espíritu. En el evangelio de Juan 11:43-44 encontramos otro ejemplo de la situación espiritual del cristiano después del nuevo nacimiento; porque Lázaro pasó de muerte a vida y salió de la tumba, pero estaba con las manos y los pies atadas con [ ]
La Biblia enseña que el cristiano debe limpiarse de toda inmundicia de la carne del espíritu. Es decir que después de haber experimentado el nuevo nacimiento se necesita ser limpio de inmundicias y contaminaciones que afectan el alma y el espíritu; para perfeccionar la santidad en cada cristiano.Un ejemplo idóneo para comprender el proceso de descontaminación del alma y del espíritu lo vemos en el proceso en el que Israel conquistó Canaán (Ro. 15:4). Cada uno de los enemigos que Israel derrotó, expulsó y/o destruyó representan los enemigos, inmundicias y contaminaciones que deben ser derrotados, expulsados y/o destruidos de nuestro cuerpo, alma y espíritu. En el evangelio de Juan 11:43-44 encontramos otro ejemplo de la situación espiritual del cristiano después del nuevo nacimiento; porque Lázaro pasó de muerte a vida y salió de la tumba, pero estaba con las manos y los pies atadas con [ ]